Florida ha consolidado su posición como el destino de preferencia para la migración de población en los Estados Unidos por segundo año consecutivo. Con más de 249,000 personas mudándose al Estado del Sol en 2022, Florida se ha convertido en el epicentro de la "gran migración de riqueza". Atraídos por su clima soleado, la ausencia de impuestos estatales sobre la renta y su economía floreciente, hogares y empresas de alto ingreso, especialmente de estados como Nueva York y California, han contribuido a este fenómeno.
Durante este flujo migratorio excepcional, Florida experimentó una afluencia de riqueza impresionante, sumando $39,200 millones después de la pandemia. Este aumento se traduce en una asombrosa cifra de $4.48 millones cada hora. Miami-Dade y Palm Beach emergieron como los destinos principales, recibiendo $7.4 mil millones y $7.2 mil millones en ingresos, respectivamente.
En contraste, Nueva York enfrentó una migración neta negativa, ocupando el segundo lugar en EE. UU. con una pérdida de más de 244,000 residentes entre 2021 y 2022. Florida, ahora el tercer estado más poblado, se convirtió en el hogar preferido para más de 90,000 neoyorquinos en 2022, con una ganancia neta de casi 70,000 residentes.
Esta tendencia plantea preguntas cruciales sobre la capacidad de Nueva York para competir en términos de clima empresarial, tasas impositivas y calidad de vida. La partida de residentes en edad de trabajar también agudiza el mercado laboral ya tenso del estado.
Con 32 de los 50 estados experimentando una migración neta positiva, este panorama demográfico en constante cambio destaca una realidad fascinante en todo el país.